lunes, 29 de noviembre de 2010

Theremin: An Electronic Odyssey

Edición en DVD del documental sobre la vida de Theremin
La vida de Lev Termen, un inventor genial.
Probablemente una de las vidas más apasionantes del siglo XX haya sido la de Lev Termen, más conocido por el galicismo de Léon Theremin. Tanto es así que para el que lea la biografía Theremin: Ether Music And Espionage (2000), de Albert Glinsky o vea el documental Theremin: An Electronic Odyssey (1993), de Steven M. Martin que hoy nos ocupa, le parecerá increíble que Hollywood no haya puesto todavía la vista en la figura del genial inventor y haya producido como mínimo una mini-serie sobre un personaje con una trayectoria vital tan interesante y llena de sucesos de todo tipo como la de Termen: Revolución Soviética, Primera Guerra Mundial, inventos adelantados a su tiempo, amores imposibles, fama y dinero, ruina económica, desapariciones misteriosas, campos de trabajo en Siberia, espionaje para el KGB... fueron sólo algunos de los acontecimientos de su vida.

La aparición de Theremin: An Electronic Odyssey en 1993 supuso una revelación para muchos. En aquel momento no existía nada parecido al 'boom' de hoy en día por el theremin, sino que lo utilizaban unos pocos nostálgicos, contados músicos profesionales y algunos aficionados al 'do it yourself' electrónico. El sonido del theremin nunca desapareció del todo del imaginario colectivo, no obstante, tras el paso del documental por diversos certámenes cinematográficos, así como los galardones obtenidos en los festivales de Sundance y San Francisco, despertó de nuevo el interés por la figura casi olvidada de Lev Sergeyevich Termen y su instrumento, entre una gran minoría de entusiastas de todo el mundo. 

viernes, 26 de noviembre de 2010

Richard Vimal. Aquarythmies

Portada de Aquarythmies de Richard Vimal
El único álbum del sello Deimos Music, el 
recopilatorio de Richard Vimal, Aquarythmies.
Si hubiera que referirse a uno de los ángeles caídos de la música electrónica popular francesa de los años 70, ésos que nadie ya recuerda, o de los que ni tan siquiera su nombre es una simple nota al margen en un libro o una página web, ése sería sin duda Richard Vimal.

Cuando se habla de música electrónica en Francia siempre sale a relucir el nombre del héroe indiscutible de la industria discográfica de aquel país: Jean Michel Jarre. Sin embargo, a la par que Jarre, hubo toda una serie de compositores, que con mayor o menor fortuna, vieron en los sintetizadores una nueva vía de expresión musical. Nombres como Richard Pinhas (y su grupo Heldon), Didier Bocquet, Joël Fajerman, Zanov, Serge Ramses, Bernard Szajner, el dúo Space Art o ya más metidos en la música disco Didier Marouani y su grupo Space, son sólo algunos de los que también hicieron su aportación a la historia de la música electrónica francesa.

El caso de Richard Vimal no deja de ser curioso. Nacido en Toulouse en 1952, Vimal no recibió ningún tipo de educación musical formal, sino que se formó de un modo autodidacta en la guitarra y el piano desde muy temprana edad. En 1973 se embarcó en un proyecto discográfico del sello Barclay producido por Dominique Perrier (más tarde fundador de Space Art, parte integrante del grupo Space y miembro estable en los 80 y 90 de la 'troupe' de estudio y directo de Jean Michel Jarre). En ese LP, Je Vous Salue Leur France -que era un álbum de 'chanson française'-, y a través de Perrier, Vimal descubrió los sintetizadores, de los que se hizo buen uso durante las sesiones de grabación.


Poco después, Vimal adquirió un sintetizador monofónico Roland SH-3 y en 1976 firmó un contrato por diez años con la multinacional Polydor, el mismo sello que en 1977 llevaría al estrellato a Jean Michel Jarre con Oxygène, y que entre 1979 y 1985 editaría gran parte del mejor material surgido de los Nemo Studios de Vangelis.

lunes, 22 de noviembre de 2010

La magia sonora del Ondes Martenot

El ondes Martenot interpretado por su inventor Maurice Martenot
Maurice Martenot interpretando el instrumento
que lleva su nombre.
El ondes Martenot es junto con el theremin, el único instrumento electrónico anterior a la Segunda Guerra Mundial que ha llegado hasta nuestros días en un buen estado de salud. Decenas son los ondistas -tal y como se denomina a los intérpretes del instrumento-,  que ofrecen conciertos y cada año se incorporan nuevas obras a su repertorio.

Aunque comenzó a trabajar en el instrumento que lleva su nombre en 1919, Maurice Martenot (1898-1980), no presentó públicamente la primera versión del mismo hasta 1928. El inventor, al igual que Lev Termen, un joven violonchelista, había sido radiotelegrafista durante la Primera Guerra Mundial (también igual que Termen), período en el que se hizo célebre entre los soldados franceses por extraer melodías electrónicas de su equipo de radio. El impacto causado por semejante hazaña para aquella época y el tipo de sonidos similares a los del ladrido de un chihuahua provocaron que la tropa apodara a Martenot como "le chien mexicain" (el perro mexicano).

El ondes Martenot se basaba en el principio del heterodino, basado en la tecnología del triodo o tubo de vacío, al igual que el theremin, el trautonium y todos los instrumentos electrónicos anteriores a 1947, fecha de la invención del transistor (que se comercializaría una década más tarde). La primera encarnación del ondes Martenot se tocaba al igual que el theremin, a cierta distancia del instrumento, con la diferencia de que en el theremin no había contacto alguno entre el intérprete y el instrumento, mientras en el ondes Martenot el intérprete llevaba un fino cable metálico anillado al dedo índice conectado al instrumento. Con el acercamiento y alejamiento del cable respecto al instrumento, el ondista determinaba los tonos.

viernes, 19 de noviembre de 2010

Synergy. Sequencer

Sequencer, segundo trabajo de Larry Fast como Synergy
La semilla de Synergy germina en la
portada del álbum Sequencer.
Tras el éxito de Electronic Realizations For Rock Orchestra, Larry Fast se embarca entre octubre de 1975 y abril de 1976 en el proceso de grabación de su segundo álbum, Sequencer, con su alias artístico de Synergy. Las mezclas finales se realizaron entre abril y mayo del mismo año en los estudios The House Of Music de Nueva Jersey y el LP finalmente se publicó en mayo de 1976.

En este álbum tuvieron lugar una serie de cambios significativos a nivel tecnológico, dado que se pasa de una grabación de 16 a 24 pistas, y gracias a la incorporación del Moog System 15 se pasó de la casi total monofonía del equipo del primer LP a una rudimentaria duofonía en algunos pasajes musicales, si bien el resto del equipamiento era prácticamente el mismo que en su disco de debut, excepción hecha del Mellotron, que ya no volverá a aparecer más en un disco de Synergy.

Sequencer se abre con el tema "S-scape", inspirado según el propio Fast, 
en la música del grupo The Who en sus acordes iniciales y en la "Troika" de la Suite Sinfónica del Teniente Kijé Op. 60 (1933), del compositor ruso Sergei Prokofiev en la sección de cuerdas. La pieza se abre con cierto aire de fanfarria anunciatoria de aire clasicista que avanza hacia tonos pastorales, con el secuenciador omnipresente a lo largo de toda la pieza; al comienzo en primer plano, para después pasar a ocupar un lugar más discreto. Como es habitual en una pieza electrónico-progresiva, hay un cambio de tempo configurando una parte rítmica en su tramo final.

lunes, 15 de noviembre de 2010

Edward Artemiev's Musical Universe. Tatiana Yegorova

Edward Artemiev retratado en la portada de Edward Artemiev's Musical Universe
Portada de la biografía Edward Artemiev's 
Musical Universe de Tatiana Yegorova.
La historia de la música electrónica tras el Telón de Acero es uno de esos temas apasionantes y poco estudiados, sobre los que existe escasísima bibliografía disponible. Fue por ello una grata sorpresa localizar durante el verano de 2009 la biografía del gran compositor ruso Edward Artemiev llamada Edward Artemiev's Musical Universe, escrita por Tatiana Yegorova y publicada por la editorial rusa Vagrius en 2007.

Para el que no le conozca, Edward Artemiev (Novosibirsk, 1937), es un pionero en la extinta Unión Soviética de la música electrónica, en la que fue introducido por el ingeniero Evgeny Murzin, inventor de uno de los más singulares instrumentos electrónicos jamás creado; el sintetizador foto-electrónico ANS, del que ya hablaremos con mayor profundidad en otra entrada.

A lo largo de su trayectoria, Artemiev ha realizado álbumes de rock progresivo, música para teatro y televisión, los más diversos trabajos electroacústicos, óperas... pero sobre todo es conocido en occidente por su faceta como compositor de las bandas sonoras de dos de los más grandes cineastas rusos de todos los tiempos: Andrei Tarkovsky y Nikita Mikhalkov. Suyas son por ejemplo, las partituras de títulos emblemáticos como Solaris (1972), Zerkalo (1975), y Stalker (1979), de Tarkovsky y Urga (1991), Quemado por el Sol (1994), o 12 (2007), por parte de Mikhalkov.

Como suele suceder con muchos artistas, y a pesar de las más de 150 bandas sonoras cinematográficas realizadas y decenas de obras para otros medios, Edward Artemiev es más conocido en el extranjero que en la propia Rusia. En este sentido la obra de Tatiana Yegorova, tiene la intención de arrojar más luz sobre la vida personal y trayectoria musical de un músico poco reconocido pero imprescindible.

viernes, 12 de noviembre de 2010

Synergy. Electronic Realizations For Rock Orchestra

El primer álbum en solitario de Synergy/Larry Fast publicado en 1975
Portada del álbum de debut de Synergy.
Para aquellos familiarizados con la trayectoria del ex-cantante del grupo Genesis, Peter Gabriel, seguramente el nombre de Larry Fast no les debe de sonar desconocido. Fast fue durante diez años (1976-1985), el brazo derecho de Gabriel, encargándose de la producción electrónica de sus álbumes en solitario del período, e introdujo al cantante británico en el uso de los primeros samplers como el Fairlight CMI o el E-mu Emulator. Paralelamente a su actividad con Gabriel y también como cotizado músico de sesión y de directo para artistas tan dispares como el grupo Nektar, Tony Levin o Jonn Serrie, entre muchos otros, Larry Fast realizó una carrera paralela en solitario desarrollando su gran pasión por la música electrónica con el nombre artístico de Synergy.

La elección del nombre de su proyecto musical no fue casual, ya que partiendo de la idea difundida por Brian Eno y Robert Fripp (a la postre totalmente acertada), según la cual el futuro de la música iba a estar integrado por "pequeñas células musicales autosuficientes", Fast creó un "grupo" de un solo miembro, libre, expandible ocasionalmente a más miembros, basado en la música electrónica, pero que podía abarcar trabajos multimedia, rock y formas clásicas, así como desarrollos tecnológicos en el campo de la electrónica. A la audacia de tales planteamientos, cabe añadir, que Fast por aquel entonces contaba solamente con 23 años de edad. 

lunes, 8 de noviembre de 2010

Jörg Mager. El genio huraño (V).

Un trágico destino


Stärker als Paragraphen, la única película realizada 
que cuenta con efectos sonoros de partiturophon.
En enero de 1933 el partido Nacional Socialista se hizo con el poder en Alemania y en cuestión de semanas los teatros de ópera y salas de conciertos comenzaron a estar controladas por matones del partido Nazi que no dudaron en expulsar y acosar a todos los empleados de estas instituciones que fueran judíos, izquierdistas y demás “bolcheviques culturales”. Los nazis consideraban que la cultura tenía que ser “un arma en manos del Estado”. Desde las altas instancias del Reich se le negó a Jörg Mager la posibilidad de comercializar sus instrumentos fuera de Alemania, de hecho el propio Joseph Goebbels, Ministro de Propaganda, denegó dichos permisos.

A pesar del opresivo clima político, Mager tuvo la posibilidad de demostrar la capacidad del partiturophon en 1936 para un film de la UFA llamado Stärker als Paragraphen dirigido por Jürgen von Alten, y con música de Rudolf Perak, en el que los efectos sonoros que correspondían a las visiones alucinatorias de su protagonista eran creados por el instrumento de Mager.

Tras esos últimos y breves destellos, la carrera de Jörg Mager se ralentizó sobremanera, se encontró con múltiples obstáculos y entró en una espiral descendente. El último instrumento de Mager, el kaleidophon fue completado en 1939 y aunque su historia no está documentada se ha descrito de un modo ciertamente ambiguo como “un instrumento electrónico monofónico con caleidoscópicas mezclas sonoras”, siguiendo los preceptos tonales de Arnold Schönberg, y Ferruccio Busoni

viernes, 5 de noviembre de 2010

Oskar Sala. Subharmonische Mixturen

Subharmonische Mixturen, obra cumbre de Oskar Sala con el Mixturtrautonium
Subharmonische Mixturen, un álbum 
clásico en la discografía de Oskar Sala.
Hace ahora algo más de ocho años, el 26 de febrero de 2002 fallecía a la edad de 91 años Oskar Sala, el último gran representante de la música electrónica anterior a la Segunda Guerra Mundial. Con su muerte se extinguió definitivamente la llama de una generación de pioneros que además de desarrollar nuevos instrumentos como el Trautonium, el Ondes Martenot o el Theremin, fueron capaces de alcanzar altas cotas de expresividad con sus propias composiciones, años, incluso décadas antes de que el sintetizador se convirtiera en una realidad tangible.

Para aquellos que no sepan qué es un Trautonium cabe indicarles que su nombre proviene del de su inventor, el ingeniero alemán Friedrich Trautwein. En origen se concibió como un instrumento solista de concierto y para musicalizar programas de radio. Se trataba de un instrumento monofónico,
basado en la tecnología del tubo o válvula de vacío, inventada por el estadounidense Lee DeForest en 1906, y que fue la base de los instrumentos y aparatos electrónicos -no sólo con fines musicales-, hasta la invención del transistor en los Bell Labs a finales de 1947.

Esta válvula de vacío era el generador de una forma de onda (un sonido), de forma continua. Hasta entonces instrumentos como el Theremin y el Ondes Martenot generaban ondas senoidales (ondas puras, sin armónicos), pero la gran aportación de Trautwein fue la introducción en su instrumento de una onda en rampa o de diente de sierra en el circuito de oscilación, que se producía añadiendo a la onda senoidal principal otras iguales a diferentes frecuencias y volúmenes, es decir, se le agregaban armónicos, algo entonces completamente nuevo.

miércoles, 3 de noviembre de 2010

The Alchemists Of Sound. The BBC Radiophonic Workshop

Desmond Briscoe, Dick Mills, Peter Howell, y otros miembros del Radiophonic Workshop en 1978
Los miembros del BBC Radiophonic Workshop 
 en 1978. Sentados en primer término Peter Howell, 
 Desmond Briscoe y Dick Mills.
Los exponentes británicos de la experimentación electrónica desde finales de los años 50 no se encontraban en laboratorios de científicos de rigurosa bata blanca de firmas como Siemens en Múnich o Philips en Eindhoven, ni tampoco en reductos elitistas de la experimentación como era el caso del GRM en París o los estudios de la WDR en Colonia, englobados dentro de las empresas de radiodifusión estatales de Francia y Alemania respectivamente.

En el Reino Unido, en cambio, tomaron el camino de en medio, y la British Broadcasting Corporation (BBC), creó un departamento de sonorización para radio y televisión que tendría una importancia fundamental en la popularización de los sonidos electrónicos en Gran Bretaña  y en medio mundo desde los años 60 hasta nuestros días. Ese departamento, conocido como BBC Radiophonic Workshop, que estuvo en activo durante cuarenta años (1958-1998), fue un paso más allá que los centros y laboratorios de otras naciones, sacando la música electrónica de oscuros estudios experimentales para unos pocos y dándola a conocer al gran público por medio de 'jingles' y sintonías para todo tipo de programas de radio y televisión.

Otros centros de experimentación electrónica miraban al Taller Radiofónico de la BBC por encima del hombro, por considerar que no era un laboratorio de experimentación pura, sin contar con compositores de peso, solamente poblado por técnicos anónimos. Lo cierto es que la utilización de técnicas de musique concrète al comienzo de su trayectoria, así como procedimientos propios que desarrollaron sobre la marcha como los "Oramics" de Daphne Oram, y los hallazgos sonoros realizados a finales de los 60 unidos a la adopción de los primeros sintetizadores comerciales británicos como el EMS VCS3, y más adelante los primeros samplers, les situaron tecnológicamente a la par de esos otros prestigiosos centros de investigación sonora.

lunes, 1 de noviembre de 2010

Jörg Mager. El genio huraño (IV).

Éxito efímero


Jorg Mager y el Partiturophon, especializado en microtonalidad
Jörg Mager posa junto al partiturophon en 1930.
El aparente fracaso de la presentación del sphärophon en Frankfurt, no supuso un contratiempo para Jörg Mager, que siguió perfeccionando su instrumento. Patrocinado por la ciudad de Darmstadt, el Instituto Heinrich Hertz y la Radio del Reich, se le ofreció la posibilidad de disponer de un pequeño castillo a las afueras de Darmstadt, un lugar donde podría trabajar y desarrollar sus instrumentos. Mager firmó un contrato según el cual se le facilitaban y aseguraban los medios técnicos, trabajadores auxiliares y todos los materiales que fueran necesarios. El castillo había pertenecido en el siglo XVIII al primer ministro del landgraviato de Hesse-Darmstadt, el barón Friedrich Carl von Moser.

Contando con la asistencia técnica del físico y también inventor de instrumentos electrónicos Oskar Vierling, Mager continuó su trabajo con su nueva invención, el klaviatursphärophon (también llamado sphärophon II), de 1928. Grosso modo, se trataba del mismo sphärophon en el que se habían reemplazado las manivelas por dos teclados monofónicos de teclas pequeñas, que permitían al intérprete tocar ambos teclados simultáneamente produciendo un sonido duofónico. Continuaba tratándose de un instrumento esencialmente dotado para la música microtonal al que se le añadieron filtros adicionales por medio de resonadores mecánicos y altavoces especialmente construidos para él. Por vez primera, Mager diseñaba un instrumento más adecuado para la interpretación y más familiar para los músicos, que lo asimilaban más fácilmente por su gran parecido a un órgano de iglesia.