viernes, 31 de diciembre de 2010

Synergy. The Jupiter Menace O.S.T.

La banda sonora del documental The Jupiter Menace
The Jupiter Menace, la primera banda sonora
realizada por Larry Fast como Synergy.
En el terreno cinematográfico, los años 70 y primeros 80 estuvieron caracterizados por el género llamado "cine de catástrofes". Hubo películas para todos los gustos, desde aquellas que escenificaban terribles accidentes aéreos, rascacielos en llamas, transatlánticos que zozobraban ante un tsunami devastador o terremotos más o menos mortíferos, hasta aquellas que mostraban sin cortapisas el fin de la humanidad  tal y como la conocemos por medio de un accidente nuclear o la colisión de un meteorito contra la Tierra. 

La proliferación de estos "disaster films", que han prolongado su éxito hasta nuestros días, también contó con numerosas aportaciones en el terreno de los documentales más sensacionalistas, sustentados en profecías y toda clase de supercherías sin la menor base científica. No era extraño en aquella época encontrar noticias en portadas de diarios sobre el avistamiento de OVNIS, del que incluso se hacían eco los informativos de televisión. Esta fiebre por lo desconocido favoreció la aparición de programas que trataban los más diversos temas misteriosos, enigmáticos o abiertamente sobrenaturales, que podían ir desde las desapariciones de barcos y aviones en el denominado Triángulo de las Bermudas o las abducciones por parte de seres extraterrestres, pasando por la existencia del mítico continente perdido de la Atlántida, los orígenes de civilizaciones antiguas como los mayas o los egipcios y todo tipo de sucesos paranormales.

The Jupiter Menace (Lee Auerbach/Peter Matulavich, 1982), se encuadra como miembro de pleno derecho en ese género del "cine de catástrofes", contando además como narrador y presentador con uno de los actores más característicos del mismo, el veterano George Kennedy, famoso por ser uno de los protagonistas de la saga de films Aeropuerto.

lunes, 27 de diciembre de 2010

El sonido de la velocidad

El sonido de la velocidad, ensayo pionero sobre la relación de cine y música electrónica
Ensayo pionero en la relación entre el
cine y la música electrónica.
"La música electrónica tiene la capacidad de generar 24 imágenes por segundo porque a su vez es capaz de generar un espacio, de construir una atmósfera, de dibujar una arquitectura acústica. Precisamente en la construcción de una experiencia que no necesita palabras para expresarse está la clave de todo: la música electrónica es la música visual por excelencia. Ésta es, por lo tanto, la historia de un matrimonio cuya vida es mucho más larga, complicada y estimulante de lo que podría pensarse en un primer momento. Un matrimonio entre el sonido y la velocidad de las imágenes".
Con esta cita que preside la contraportada del ensayo El sonido de la velocidad (VV.AA, Alpha Decay, 2005), se resume a la perfección la esencia de la obra y la relación que pretende establecer entre el Séptimo Arte y la música electrónica. 

Con textos a cargo de Dj Spooky, Oriol Rossell, Jordi Costa, Quim Casas, Miguel Fernández Labayen, David Broc, Javier Ariza, Javier Blánquez, Héctor Castells, Roc Jiménez, Pablo G. Polite y Sergi Sánchez, El sonido de la velocidad se erige como una referencia bibliográfica esencial, no ya sólo dentro del yermo panorama de la publicación de libros relacionados con la música electrónica o las nuevas tecnologías musicales en España, sino como un trabajo referencial a nivel internacional, y hasta donde se tiene constancia, por ser el primero en su género.

Por increíble que parezca, las relaciones entre cine y música electrónica se encuentran diseminadas en multitud de libros, generalmente anglosajones, sobre la historia de la música electrónica, pero ninguno con anterioridad a éste y tampoco después de su publicación se ha atrevido a hacer un estudio tan valiente como el que aparece aquí.

viernes, 24 de diciembre de 2010

Synergy. Computer Experiments Volume One

Computer Experiments, el LP atmosférico de Synergy
Computer Experiments Volume One (1981),
el álbum 'ambient' de Synergy.
La música por ordenador había entrado en el alcance del radar de Larry Fast a mediados de los años 70. Siempre atento a todas las novedades y desarrollos tecnológicos de vanguardia con aplicaciones musicales, ya había utilizado un ordenador Apple II para secuenciar en su álbum Cords de 1978. Asimismo, desde 1976 mantenía contactos con los Bell Labs y sus experimentos en dicho centro con el prototipo de sintetizador digital Alles Synthesizer, se concretaron en el álbum Games (1979). Todo este bagaje con la música generada por ordenador desembocó en Computer Experiments Volume One, el álbum más atípico en la carrera de Synergy.

Larry Fast comenzó el proyecto de Computer Experiments Volume One sin tener en mente la idea de hacer un álbum. Simplemente comenzó a experimentar para averiguar dónde estaban los límites de un ordenador al que el propio compositor le confiriese de mayor control sobre la composición musical. En este sentido, este álbum supone un punto y aparte, un proyecto totalmente distinto respecto a las grabaciones totalmente controladas en cuanto a la composición, programación de los sonidos y producción final que habían caracterizado hasta entonces la trayectoria discográfica de Synergy.

En 1980 Fast ya no tenía acceso a la exclusiva tecnología de los Bell Labs. No obstante, gracias a su amigo John Simonton, fundador de PAiA Electronics -una pequeña firma especializada en la fabricación de módulos de sintetizador en kit, radicada en Oklahoma City-, tuvo acceso a "Pink Tunes", un 'software' que el propio Simonton había escrito y que era capaz de generar un cierto grado de aleatoriedad controlada por el compositor. 

lunes, 20 de diciembre de 2010

Oskar Sala. Die vergangene Zukunft des Klanges

La historia de Oskar Sala y el trautonium
Cartel del documental biográfico sobre Oskar Sala.
En los últimos años, y sobre todo con la aparición del formato DVD, los "audionautas" que buscamos conocer más detalles sobre la historia de la música electrónica, hemos visto satisfechas nuestras expectativas. Leon Theremin, Robert Moog, Bruce Haack, Jean Jacques PerreyRaymond Scott o Erkki Kurenniemi son sólo algunos de los pioneros que cuentan con documentales dedicados a glosar su vida, su obra y su legado.

En esa ilustre lista faltan personalidades de la talla de Pierre Schaeffer o Karlheinz Stockhausen que todavía no tienen un film a la altura de su trascendencia histórica dentro de la música del siglo XX. Con otros en cambio, como es el caso de Oskar Sala que hoy nos ocupa, sí existe un documental, pero desgraciadamente no ha podido ser editado todavía y su exhibición sólo se ha hecho por medio de festivales de cine o ciclos dedicados a la figura del artista.

Ante esta situación, hace alrededor de un año me puse en contacto vía email con la productora alemana Upstart! para ver si existía alguna posibilidad de adquirir el documental Oskar Sala. Die vergangene Zukunft des Klanges, dirigido en el año 2000 por Oliver Rauch e Ingo Rudloff. Desde la productora a su vez remitieron mi correo electrónico a Oliver Rauch, que muy amablemente me contestó y me habló entre otras cosas de lo inspiradora que era la figura y la obra de Sala, y que él y Rudloff, el co-director, llevaban batallando casi diez años para que se editara el documental en DVD, pero que diversos problemas de índole legal con las licencias de la película, les habían impedido conseguir su objetivo.

viernes, 17 de diciembre de 2010

Synergy. Audion

Audion, el quinto proyecto de Larry Fast como Synergy
Audion (1981), el quinto álbum de Synergy.
Cuando empezó el proceso de composición de su quinto álbum, Audion (1981), Larry Fast acababa de finalizar su colaboración de cuatro años (1976-1980), en los Bell Labs, cuyos frutos se vieron mínimamente reflejados en su álbum Games (1979). Sin embargo, los precios prohibitivos de los nuevos instrumentos digitales que comenzaban a aparecer en el mercado, como el Crumar GDS, el Fairlight CMI o el NED Synclavier y el hecho de no pertenecer a su círculo de desarrolladores, no le permitieron a Fast acceder a la tecnología digital que había experimentado en el avanzado centro de investigación.

No sería hasta 1987, en su álbum Metropolitan Suite con el que Larry Fast podría abrazar de lleno la era digital. Aunque hasta entonces no pudo disponer de ella en sus propios álbumes, sí lo hizo, no obstante, en el álbum Peter Gabriel 4 (1982), y en sus colaboraciones en trabajos de otros artistas.

Por tanto, para Audion Larry Fast se tuvo que conformar con refinar todavía más sus grabaciones analógicas. Desde un punto de vista de síntesis, Fast estuvo capacitado para explorar las texturas sonoras con un mayor grado de detalle gracias a un equipo más sofisticado, en el que destacaba especialmente el Sequential Circuits Prophet 5, mayor control del ordenador en algunos procesos como la secuenciación y el complemento de los efectos digitales.

En esta ocasión, el Synergy Studio había alcanzado el suficiente grado de sofisticación como para obtener por vez primera resultados óptimos en ocho pistas, no muy alejados de los resultados que obtendría Fast en la mezcla final en los estudios The House Of Music en 24 pistas.

lunes, 13 de diciembre de 2010

Keyboard Presents: The Best Of The '80s

Las mejores entrevistas de Keyboard recopiladas en The Best Of The '80s
Los artistas, los instrumentos y las técnicas que según
Keyboard definieron musicalmente los años 80.
Desde 1975, la revista especializada estadounidense Keyboard es probablemente la más popular en el mundillo de los instrumentos electrónicos a ambos lados del Atlántico, y una de las más prestigiosas del sector junto con la también estadounidense Electronic Musician y la británica Sound On Sound. Aunque originalmente se centraba en los análisis de todo tipo de teclados y sintetizadores, además de entrevistas a diversos teclistas y sintesistas, con la popularización de la informática con fines musicales en los años 90, ampliaron su campo de acción y fueron incorporando nuevas secciones dedicadas a la música digital: sintetizadores por software, secuenciadores y las más variadas herramientas de grabación en estudio.

El paso de los años, cambios de manos en la propiedad de la revista, la competencia de internet, así como el cese de algunos de sus editores históricos como Jim Aikin o Ernie Rideout, han provocado que en los últimos tiempos Keyboard haya perdido muchos enteros, o lo que es lo mismo, que tenga un menor número de páginas y menos lectores. Así y todo, se mantiene como una revista de referencia dentro del sector de las publicaciones profesionales sobre equipos e instrumentos electrónicos.

Precisamente Ernie Rideout, antes de dejar su cargo (aunque sigue colaborando con la publicación), junto a los editores Stephen Fortner y Michael Gallant se encargaron de realizar un compendio de las mejores entrevistas realizadas, en su mayor parte por antiguos redactores de la revista como Dominic Milano y Bob Doerschuck, durante la década de los 80, y agruparlas en un libro bajo el nombre Keyboard Presents: The Best Of The '80s (Backbeat Books, 2008).

viernes, 10 de diciembre de 2010

Synergy. Games

Portada del cuarto álbum de Larry Fast, Games
La impactante portada del cuarto álbum
de Synergy, Games (1979).
Si en algo se había caracterizado desde el principio la carrera de Larry Fast con su proyecto Synergy, había sido por el hecho de estar siempre a la vanguardia tecnológica en materia musical. Diversas firmas de instrumentos electrónicos, entre ellas Moog y Oberheim, recurrían a Fast como músico probador de sus nuevos instrumentos y en varias ocasiones, como en el caso del Polymoog, también participaba como consultor técnico en su desarrollo.

Lo que no se sabía es que desde 1976, poco después de finalizar la grabación de Electronic Realizations For Rock Orchestra, Larry Fast había entrado en contacto, por medio de Bob Moog con los AT&T Bell Laboratories (actualmente Alcatel-Lucent Bell Labs), que desde 1925 es uno de los principales centros de investigación de vanguardia, y que cubre áreas que abarcan desde la  propia invención del transistor, el láser o las placas solares hasta los satélites de comunicaciones. Por lo visto en dicho centro buscaban un músico con suficientes conocimientos en el campo de la ingeniería informática como para ejercer de probador y consultor, y ser al mismo tiempo capaz de comunicarse en los mismos términos que los científicos.

Recordemos que Larry Fast no era precisamente un profano en el terreno de la ingeniería informática y la programación, ya que venía experimentando de manera directa con ordenadores en su música desde su álbum Cords (1978), en el que por vez primera utilizó un Apple II para secuenciar, y previamente había utilizado programas escritos en BASIC por él mismo en el micro-ordenador KIM-1, ambos basados en el procesador MOS 6502.

lunes, 6 de diciembre de 2010

Novachord. ¿El primer sintetizador polifónico en 1938?

El sintetizador de 72 voces de polifonía Hammond Novachord
El Hammond Novachord, el primer sintetizador polifónico.
Seguro que muchos os preguntaréis ¿cómo es posible que alguien se plantee siquiera que en 1938 se inventara el primer sintetizador polifónico? ¿Y si añadiera además que tenía una polifonía de 72 voces y era un sintetizador analógico aditivo? Seguramente antes de terminar la frase ya estaríais llamando al manicomio más cercano. Aunque pueda parecer lo contrario, no he perdido la razón... todavía.

Bromas aparte, para el que esto escribe, la invención del Hammond Novachord es una más de las grandes gestas que jalonan la historia de la música electrónica. Una de esas historias que parecen provenir de una realidad paralela, y más cuando los 'supuestos' primeros sintetizadores polifónicos comerciales no se hicieron una realidad hasta 35 años después del proto-sintetizador diseñado por John M. Hanert, Laurens Hammond y C.N Williams.

Probablemente si me hubieran contado esta historia cuando recién estaba introduciéndome en la historia del sonido electrónico, a buen seguro no la hubiera creído. De hecho aún hoy cuesta asimilarla, y desde mi punto de vista, va directamente al cajón de los 'expedientes X' de la música electrónica. Entre la extensa bibliografía que he podido consultar sobre sintetizadores y otros instrumentos de teclado, el Novachord prácticamente no aparece ni mencionado y si lo hace, se refieren a él como un órgano eléctrico o un piano electrónico (sic). Esta presencia testimonial quizá se deba a los otros productos de su fabricante Hammond (los órganos eléctricos/electrónicos), lo que ha provocado que durante décadas muchos no lo consideraran como un sintetizador.

viernes, 3 de diciembre de 2010

Synergy. Cords

La portada de Cords (1978), diseñada
por la compañía británica Hipgnosis.
Larry Fast retomó su carrera en solitario como Synergy con Cords, su tercer álbum, en septiembre de 1978. Su obra más madura y compleja hasta entonces, llama la atención a primera vista por la enigmática portada creada por la compañía británica Hipgnosis, generadores de todo un estilo visual para los artistas punteros surgidos en los años 70, como es el caso de Genesis, Peter Gabriel, Pink Floyd o The Alan Parsons' Project entre muchos otros, y muy vinculada al espíritu de libertad creativa y mentalidad abierta que se originó en dicha década. 

El trabajo desarrollado en Cords comenzó a gestarse a finales del verano de 1977. Fast tenía entonces un contrato discográfico con Passport Records, sello que le obligaba a entregar un disco anual, no obstante, su participación en la banda progresiva Nektar y en el segundo álbum de Peter Gabriel, retrasó la aparición de un nuevo álbum como Synergy hasta finales de 1978.
 
Es sus dos primeras obras, Fast solía incluir un comentario en el que se jactaba de la no presencia de guitarras en sus elepés, y que decía textualmente "and nobody played guitars" dado que en aquella época, bandas como Queen en su primer álbum hicieron lo contrario e incluyeron pegatinas en las cubiertas de los discos indicando textualmente "and nobody played synthesizers!", ejemplo que siguieron otros artistas. Sin embargo, para Cords, Fast incorpora por vez primera un controlador digital de guitarra, sistema a través del cual con una guitarra eléctrica se podían comandar diversos sintetizadores analógicos