El arte del theremin
Un jovencísimo Robert Moog tocando un modelo de theremin de su propia invención. |
En mayo de 1962, en plena Guerra Fría, Robert y Clara Rockmore estaban de visita turística en la Unión Soviética. Robert quería conocer el país del que era originaria su esposa. Mientras estaban en Moscú pensaron en Lev Termen, pero ya había pasado un cuarto de siglo desde que lo habían visto por última vez. Una noche, durante una cena con un científico, Robert Rockmore le preguntó por pura curiosidad si sabía algo de un inventor llamado Termen. El científico, contestó como quien no quiere la cosa "he almorzado con él hoy". Clara casi se desmayó al escuchar estas palabras.
Quedaban pocos días para que el matrimonio Rockmore abandonara la Unión Soviética, por tanto no podían recurrir a los conductos oficiales para reencontrarse con el inventor. Al día siguiente y por medio de la recepcionista de su hotel se arregló una conversación telefónica con Termen. La misma voz que Clara recordaba sonó al otro lado del aparato. Su reencuentro se produjo en una estación de metro, un lugar idóneo para mitigar las voces de su conversación y las escuchas indiscretas de eventuales miembros de los servicios de seguridad.
Al día siguiente de este breve encuentro, el matrimonio Rockmore tenía que asistir a una representación teatral. Termen les dijo que durante el intermedio salieran del teatro. Él estaba fuera esperándoles en un taxi que les condujo a su modesto apartamento en el complejo de viviendas Leninsky Prospekt, donde pasaron una velada muy musical con la esposa y las hijas del inventor.